Continuamos con los trabajos de ejecución de la estructura del edificio. Avanzan los desarrollos de las bóvedas tanto en la parte norte como las bóvedas del lado sur.

Foto 1. Desarrollo de la bóveda norte. Mallazo, colocación de ladrillos macizos y capa de mortero de cal.
La ejecución de las bóvedas avanza a buen ritmo. El desarrollo del proyecto permite repetir el trabajo en cada uno de los vanos que forman las estancias, por lo que tan solo precisamos de dos cimbras.
Por exigencias estructurales la ejecución de las bóvedas se hace en tramos de 150 cm por vano, es decir, no se ejecuta la bóveda completa de cada vano o estancia, sino que se ejecuta por parte de forma lineal.

Foto 2. Desarrollo de las bóvedas sur de forma conjunta a la ejecución de las costillas.
Esto nos permite ir adaptando paulatinamente las cargas de los empujes laterales de las bóvedas hacia los muros de cara de termoarcilla reduciendo al mínimo los riesgos de fisuración por sobrecargas puntuales excesivas.

Foto 3. Detalle de la colocación de la cimbra en la siguiente habitación.
A la vez que se ejecutan las bóvedas en cada tramo de forma lineal, se ejecutan las costillas de ladrillo que darán soporte a la cubierta del edificio. Estas costillas se ejecutan con ladrillo hueco cerámico cada 100 cm. La ejecución de esta parte de la albañilería se encarga de dotar a la cubierta la pendiente necesaria de la cubierta.
Una vez terminadas las costillas apreciamos la pendiente de la cubierta. En esta fase de obra hay que tener en cuenta la primera fase de las instalaciones que puedan afectar a la cubierta (electricidad y fontanería), dejando los tubos ya preparados antes de pasar a la fase de aislamiento.
La distancia de 100cm entre cada costilla facilitara una vez ejecutado el aislamiento la cobertura mediante tablero machihembrado de la misma dimensión.
La bóveda por la parte interior queda terminada una vez retirada la cimbra, siendo necesario tan sólo un rejuntado mediante mortero coloreado.

Foto 5. Detalle acabado de la bóveda central en el salón.

Foto 6. Vista general de la bóveda del salón en todo su desarrollo

Foto 7. Vista general de la bóveda del salón en todo su desarrollo
La estructura del edificio ya está terminada por lo que las siguientes fases son las de aislamiento del la envolvente. Para ello vamos a utilizar un aislamiento ecológico proyectado: La celulosa.
La celulosa es un aislamiento cuyo proceso de fabricación comienza pasando papel de periódico por una trituradora de martillos. Se mezcla después con los minerales bóricos y se ensaca.
El proceso de fabricación de la guata de celulosa es, con una gran diferencia, el que menor consumo de energía presenta:

Foto 8. Fase de aislamiento mediante celulosa proyectada.
Previamente a la cobertura del aislamiento se dispone de una lámina impermeable transpirable que permita el flujo de vapor de agua en el cerramiento pero a la vez proteja el mismo de posibles afecciones por agua.

Foto 9. Instalación de la lámina de vapor sobre la costillas de ladrillo.
Una vez instalada esta lámina se procede a la cobertura del edificio con tablero machiehembrado cerámico convencional sobre el que se realizará una camisa de mortero de 2 cm.

Foto 10. Ejecucición del tablero machiembrado sobre la lamina de vapor.

SEAS es el centro de formación online del Grupo San Valero, especializado en el ámbito técnico, industrial y de empresa. Visita www.seas.es para consultar nuestra oferta formativa de cursos y másteres. Formación profesional para el empleo de calidad y accesible para todos.